Don Marcos, como todos le conocían, pertenece a esa galería extraordinaria de personalidades que investigó en y sobre Canarias durante el siglo XX. En ella figuran, entre otros, historiadores y cronistas de la talla de Elías Serra Ráfols, Alejandro Cioranescu, María Rosa Alonso, Enrique Roméu Palazuelos, Leopoldo de la Rosa, José Peraza y Luis Diego Cuscoy.
Las buenas bibliotecas reflejan sin duda los intereses y la personalidad de sus dueños. En esta encontramos al Guimerá interesado por la deontología profesional y por la propiedad de las aguas y los heredamientos, con estudios sobre los repartimientos a partir de la conquista o los derechos de alumbramiento. Don Marcos investigó sobre las relaciones de poder de la nobleza y alta burguesía de las islas, difundiendo el término "pleito insular", que muchos le atribuyen, para describir el enfrentamiento entre los grupos de poder de las islas capitalinas que ha marcado la realidad política y económica de Canarias desde el siglo XIX.
Ya avanzados los años sesenta el notario se hizo más historiador, aprovechando su gran conocimiento de las fuentes documentales y se centró en las biografías de personajes notables, en el papel de las instituciones insulares y en otros hechos que marcaron la historia de Canarias.
Los libros que ahora recibimos se encontraban en la finca San José (El Sauzal, Tenerife), en una ubicación idílica para el recogimiento, la lectura y el estudio. Un lugar en plena naturaleza con vistas privilegiadas al océano, al Teide y al acebuche centenario.
Ahora están ya en nuestra biblioteca de Guajara. Esperamos que se adapten bien a su nueva ubicación y estimulen la curiosidad por el conocimiento de los estudiantes y el interés de nuestros investigadores para que obtengan el mejor provecho de ella.
En la Biblioteca de la ULL ya trabajamos para acoger este regalo en las condiciones que se merece, facilitando su difusión entre la comunidad universitaria y el público interesado en nuestra historia.
Mi gratitud, en nombre de los hermanos Guimerá Ravina, al Vicerrectorado de Investigación y Biblioteca General de la Universidad de La Laguna por haber acogido la biblioteca de nuestro padre, fruto de su labor investigadora de más de cincuenta años. Saludos.
ResponderEliminarLa generosidad de la familia Guimerá con esta donación a la Universidad de La Laguna está a la altura del inestimable valor histórico y bibliográfico de la biblioteca de don Marcos. En nombre de nuestros alumnos, docentes e investigadores, somos nosotros quienes estamos agradecidos por este desinteresado gesto.
ResponderEliminar